miércoles, 4 de julio de 2012

Trauma acústico laboral


Dra. Patricia Guinto 

A través de la historia, los seres humanos hemos confrontado enormes retos.

Un reto importante es la constante adición de fuentes de sonido que son peligrosas para la audición. El hombre reconoce desde las épocas más antiguas la relación directa entre ruidos intensos y daño auditivo.

Los oídos mamíferos han evolucionado para responder al sonido con gran sensibilidad y selectividad.

Sin embargo, no han evolucionado para tolerar algunos de los sonidos provocados por el hombre que no tienen características físicas naturales. Estos perjudican la audición.

Los ruidos naturales no causan traumas acústicos salvo casos extremos como seria la exposición cercana a rayos.

Los sonidos generados por explosivos, ruido industrial, herramientas de poder, instrumentos electrónicos (aún acústicos), y el abuso de audifonos, frecuentemente llevan a déficits auditivos permanentes. Las actividades de la vida diaria tienen muchos peligros para la audición humana.

RUIDO: sonido excesivamente alto, no deseado, no querido, experimentado por un individuo. Los efectos del ruido dependen de varias características del sonido, como la intensidad (más o menos intensos), el espectro (frecuencia alta o frecuencia baja),  la vida media de acúmulo de exposición ( exposiciones prolongadas o cortas), patrones (exposición contínua, interrumpida, por el mismo tiempo de duración e intensidad.


El TRAUMA ACÚSTICO ocurre cuando impulsos de ruidos de alta intensidad, como de 140 dB, (por ejemplo, explosiones), penetran al oído sin que sean suficientes los mecanismos protectores del mismo. y pueden causar sordera inmediata o crónica e irreversible.

Ejemplos de intensidad de fuentes productoras de ruido:
Conversación normal:                         50-60 decibeles
Bote de motor:                                   74-114 decibeles
Motocicletas:                                     por arriba de 110 decibeles
Cortacéspedes:                                  arriba de 96 decibeles
Armas de cacería:                              143-173 dB
  
Se desconoce el número exacto de personas con riesgo, ya que no solamente están expuestas las personas que trabajan en ambiente ruidoso, sino también las personas que escuchan música con volumen alto, cazadores o las personas que manejan vehículos ruidosos.
El máximo ruido permitido en promedio es de 90 dB por 8 h diarias de labor.
La sordera  inducida por ruido, está entre las 10 causas más comunes de enfermedad ocupacional. Generalmente es bilateral pero no es raro que sea asimétrica. En general e produce por exposición prolongada a ruido mayor de 85 dB.

FACTORES PREDISPONENTES:

1. Bases genéticas. Algunos individuos son más resistentes que otros. El riesgo está dado por la susceptibilidad genética y la duración e intensidad de la exposición al ruido.
2. Sordera por edad
3. Sordera por medicamentos que afectan el oído
4. Vibración de la fuente de sonido (por ejemplo, taladros, etc,)

Los pacientes se quejan frecuentemente de un deterioro gradual en la audición. La queja más común es la dificultad en la comprensión del lenguaje, especialmente en la presencia de ruido ambiental. Hay distorsión del entendimiento del lenguaje, sobre todo con personas con voz aguda, como niños y mujeres. También hay zumbido de oídos, y la mayoría de los pacientes lo describen como un sonido de alta frecuencia como un timbre, pero algunos con tonos de baja frecuencia, como un zumbido, o como olla de vapor,
Los lugares cerrados son potencialmente mas nocivos que los abiertos ya que las ondas sonoras se reflejan en las superficies sólidas a las que hacen vibrar por resonancia.
El viento si se dirige hacia el observador aumenta los efectos del ruido.
La densidad atmosférica, si aumenta, incrementa el efecto nocivo.
No se conocen aún los factores que influyen en la existencia de distinta susceptibilidad individual.
A mayor edad, mayor riesgo.
El sexo femenino parece ser el menos expuesto.

Tratamiento   

No hay tratamiento médico ni quirúrgico para revertir los efectos de la sordera inducida por ruido.
La prevención es lo prioritario.
Es posible que la pérdida de la audición no sea corregible. El objetivo del tratamiento es controlar la lesión y proteger el oído de un futuro daño.
El uso de un aparato auditivo puede beneficiar la comunicación de la persona.

Prevención   

Se recomienda el uso de protectores auditivos u orejeras contra el daño causado por equipos ruidosos y ser consciente de los riesgos que implican las actividades con exposición a ruido intenso, como las motocicletas, taladros, motores, etc.  No es recomendable escuchar música a volumen alto durante períodos prolongados de tiempo.

1 comentario:

  1. Dra.
    el trauma acustico tambien afecta la vía osea en una audiometria tonal?
    Saludos

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